El hormigón puede ser llevado un paso más allá para lograr una mejor integración con los materiales que están siendo más utilizados ultimamente. Creando una carcasa quebarada de hormigón para un edificio de estructura ligera de acero y vidrio se podría controlar la luz y la temperatura, además de conseguir una apariencia innovadora e imponente que combina la potencia del hormigón con la transparencia del vidrio.
Aplicando las cáscaras quebradas de hormigón a cajas de acero y vidrio se podría construir este gimnasio propuesto para el Parque de Roma en Madrid.